Miranda y las Tortugas Marinas



Miranda estaba muy emocionada porque iba a ir de vacaciones con su familia a las playas de Margarita. Había oído que eran unas playas hermosas y que había muchas cosas divertidas para hacer.

Cuando llegaron, la tía Tibisay los recibió con mucho cariño y les mostró su casa cerca de la playa. Miranda estaba feliz de estar allí con su familia y se fue corriendo a la playa para ver el mar.

-¡Mamá, papá, abuelos! ¡Vengan rápido! -gritó Miranda mientras corría hacia ellos-. ¡El mar es increíble! Todos fueron juntos a la playa y disfrutaron del sol, el mar y la arena.

Pero un día, mientras paseaban por la playa, encontraron una tortuga varada en la orilla. -¡Miren! ¡Una tortuga! -exclamó Miranda. La tía Tibisay explicó que era una tortuga marina en peligro de extinción y que necesitaba ayuda.

Todos se pusieron manos a la obra para llevarla al agua, pero no fue fácil porque era muy pesada. Finalmente lograron llevarla al agua y todos aplaudieron cuando vieron cómo nadaba hacia alta mar. Después de ese día, Miranda decidió que quería hacer algo más por ayudar a las tortugas marinas en peligro.

Así que investigó sobre ellas en internet y descubrió que muchas veces mueren atrapadas en redes de pesca ilegales. Con mucha determinación, decidió hablar con los pescadores locales para pedirles que no usaran redes ilegales para pescar.

Les explicó lo importante que era proteger a las tortugas marinas y les enseñó cómo podían hacerlo. Al principio, algunos pescadores no estuvieron de acuerdo, pero Miranda siguió hablando con ellos y finalmente logró convencerlos.

Poco a poco, la playa se convirtió en un lugar más seguro para las tortugas marinas gracias al esfuerzo de Miranda. Cuando llegó el momento de irse de Margarita, Miranda estaba muy feliz por haber hecho algo importante por la naturaleza.

Sabía que había muchas cosas más que podía hacer para proteger el medio ambiente y estaba decidida a seguir haciéndolo. -Gracias tía Tibisay por enseñarme lo importante que es cuidar nuestro planeta -dijo Miranda antes de partir-.

¡Volveremos pronto! Y así fue como Miranda aprendió una lección importante sobre el cuidado del medio ambiente y decidió tomar acción para protegerlo.

FIN.

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