Mis vacaciones en familia
Había una vez una familia que decidió tomarse unas vacaciones muy especiales. Martín, Clara, y sus hijos, Sofía y Tomás, estaban emocionados por pasar tiempo juntos y disfrutar de un viaje inolvidable.
"¿A dónde iremos de vacaciones este año, papá?", preguntó Sofía con entusiasmo. "Vamos a visitar las Cataratas del Iguazú en la provincia de Misiones", respondió su papá con una sonrisa. Así que la familia empacó sus maletas y partió hacia esta maravilla natural.
Al llegar, se maravillaron por la imponente belleza de las cataratas. Mientras caminaban por los senderos, conocieron a Lucas, un guía local que les contó leyendas y secretos sobre el lugar.
Juntos, realizaron excursiones en la selva, avistaron animales exóticos y se refrescaron con el roció de las cascadas. Sin embargo, un día, mientras recorrían un sendero, Tomás tropezó y se lastimó el tobillo. "¡Ay, me duele mucho!", exclamó Tomás con lágrimas en los ojos.
La familia se preocupó, pero Lucas, el guía, les brindó ayuda y les explicó cómo cuidar la lesión. A partir de entonces, las vacaciones cambiaron un poco: Tomás tuvo que usar muletas, pero la familia continuó disfrutando juntos.
Descubrieron la riqueza de la flora y fauna, se relajaron al sol en la orilla del río, y se sumergieron en la cultura guaraní. Al final del viaje, Tomás se sentía mucho mejor y la familia había vivido momentos inolvidables.
Aprendieron el valor de la solidaridad, el cuidado de la naturaleza, y la importancia de adaptarse a los imprevistos. Regresaron a casa con el corazón lleno de hermosos recuerdos y la promesa de que, en su próxima aventura, estarían aún más unidos como familia.
FIN.