Nacho tortuga y su aventura voladora

Nacho era una tortuga muy curiosa que vivía en la selva. Siempre había soñado con volar como las aves que veía pasar por encima de su caparazón. Un día, mientras exploraba la selva, Nacho encontró un celular abandonado por unos turistas. Al acercarse, el celular comenzó a brillar y a emitir un zumbido extraño. Con un poco de miedo, Nacho decidió tocar la pantalla y, de repente, ¡el celular lo envolvió en una luz brillante y lo hizo levitar por los aires! Asustado pero emocionado, Nacho empezó a bolar sin control por encima de la selva. Pasó por encima de los árboles, vio el río serpentear y saludó a los monos que se asombraban al ver a una tortuga voladora. Entre tanto alboroto, Nacho se dio cuenta de que no sabía cómo parar.

- ¿Qué está pasando? ¡Estoy volando! -exclamó Nacho asustado.

- Tranquilo, Nacho, debes concentrarte. Intenta recordar las historias que has escuchado sobre cómo las aves planean y buscan corrientes de aire para mantenerse en el aire -le aconsejó un pequeño pájaro.

- Tienes razón, debo mantener la calma y usar mi ingenio para encontrar una solución -pensó Nacho. Decidió observar a los pájaros, imitando sus movimientos y buscando corrientes de aire. Poco a poco, empezó a controlar su vuelo y a dirigirse hacia un claro en la selva.

Al llegar al claro, Nacho bajó lentamente y aterrizó suavemente. Estaba emocionado por haber vivido esa aventura, pero sabía que debía devolver el celular y contarles a sus amigos lo que había aprendido. Al día siguiente, reunió a los animales de la selva y les contó su experiencia. Les explicó cómo afrontó el miedo y utilizó su ingenio para resolver un problema inesperado. Todos lo aplaudieron y celebraron su valentía. Desde ese día, Nacho se convirtió en un ejemplo para los demás animales, recordándoles que con esfuerzo y valentía, ¡todo es posible!