Navegando Seguro en Villa Digital

Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Digital, una niña llamada Caperucita Roja. Ella era muy curiosa y le encantaba explorar el bosque virtual que rodeaba su casa.

Un día, su mamá le pidió que llevara una cesta con galletitas a su abuelita, quien vivía al otro lado del bosque, pero con una advertencia especial: "No hables con extraños en internet". Caperucita Roja prometió obedecer y se adentró en el bosque virtual.

En el camino se encontró con el lobo feroz, quien la detuvo repentinamente. - ¡Hola Caperucita! ¿A dónde vas tan apurada? - preguntó el lobo con una sonrisa maliciosa.

Caperucita recordó la advertencia de su mamá y respondió con cautela: "Voy a llevarle estas galletitas a mi abuelita". El lobo pensó rápidamente un plan para engañar a Caperucita. Con voz amigable le dijo: "Tengo un atajo por este link aquí, te llevará directo a la casa de tu abuelita.

¡Ella estará tan feliz de verte antes!"Inocentemente, Caperucita hizo clic en el link que le ofrecía el lobo sin sospechar sus intenciones malvadas.

Pero justo antes de presionar —"Enter" , recordó las palabras de su mamá y decidió no seguir las indicaciones del lobo. - Gracias por la oferta, señor Lobo, pero prefiero seguir mi camino por donde conozco - respondió Caperucita valientemente. El lobo gruñó molesto al ver frustrado su plan y desapareció entre los árboles virtuales.

Caperucita continuó su camino siguiendo las indicaciones seguras que había aprendido en clase sobre cómo navegar de forma responsable por internet.

Al llegar a la casa de su abuelita, Caperucita compartió lo ocurrido y juntas descubrieron que el lobo feroz intentaba engañarla para hacerle daño. Agradecida por haber prestado atención a los consejos de seguridad en línea, Caperucita prometió ser aún más cuidadosa en sus futuras aventuras virtuales.

Desde entonces, Caperucita Roja navegaba por internet con precaución y sabiduría, evitando los peligros que podían acechar detrás de cada click. Y aunque siempre habrá lobos tratando de engañarla, ella sabía que estaba preparada para enfrentar cualquier desafío gracias a los conocimientos adquiridos sobre seguridad informática.

Y colorín colorado, este cuento seguro ha educado.