Nico, el defensor de los animales

Nico era un niño muy especial. Desde pequeño, sentía un gran amor por los animales. Siempre se mostraba preocupado por su bienestar y no soportaba ver cómo otros niños los maltrataban.

Un día, mientras paseaba por el parque, vio a un grupo de niños asustando a un gatito indefenso. Sin dudarlo, corrió hacia ellos y les dijo: '¡Dejen en paz al gatito! ¡No está bien asustarlo así!'. Los niños se burlaron de él, pero Nico no se amedrentó.

Decidió llevarse al gatito a su casa y cuidarlo. Lo llamó Calcetín, por las manchas blancas en sus patas. A partir de ese día, Nico y Calcetín se volvieron inseparables.

Nico comenzó a investigar sobre cómo proteger a los animales y a compartir esa información con sus compañeros. Poco a poco, logró que muchos de ellos entendieran la importancia de respetar a los animales y de brindarles amor y cuidado.

Incluso organizó una campaña en la escuela para recolectar alimentos y medicinas para los animales abandonados. Su labor no pasó desapercibida y fue reconocida por la comunidad. Nico se convirtió en un verdadero defensor de los animales, inspirando a otros a seguir su ejemplo.