Nina la osita bailarina
Había una vez en el bosque encantado, una osita llamada Nina que soñaba con ser bailarina de ballet. Nina pasaba sus días saltando y girando entre los árboles, pero cuando les contaba a los demás animales sobre su sueño, ellos se reían y le decían que no podía ser bailarina porque era una osita.
A pesar de todo, Nina no se desanimaba. Un día, decidió ir a hablar con la vieja y sabia tortuga, quien le dijo: 'Nina, si realmente quieres bailar ballet, debes creer en ti misma y practicar duro. No importa lo que los demás digan, tú puedes lograrlo.' Con estas palabras, Nina se sintió llena de energía y decidió empezar a entrenar.
Nina practicaba todos los días en secreto, escondida entre los arbustos, para que nadie la viera. Su determinación la llevó a avanzar rápidamente, y sus movimientos eran cada vez más elegantes y gráciles. Un día, el conejo curioso la descubrió mientras bailaba, y en vez de reírse, se quedó impresionado por su destreza. 'Nina, no tenía idea de que pudieras bailar tan bien. Deberías mostrarle a todos lo que puedes hacer', exclamó el conejo emocionado.
Así que, Nina decidió organizar una función de ballet en el claro del bosque. Los animales del bosque se reunieron para verla bailar, y al principio estaban escépticos, pero en cuanto Nina empezó a bailar, quedaron maravillados. Su gracia y delicadeza los dejaron sin palabras, y al final de la función, todos la ovacionaron y elogiaron su talento.
Desde ese día, Nina se convirtió en la bailarina favorita del bosque, y les demostró a todos que, con esfuerzo y determinación, se pueden alcanzar los sueños, sin importar las opiniones de los demás.
FIN.