Noelia y el ogro del bosque
Había una vez en un bosque mágico, una pequeña princesa guerrera llamada Noelia. Era valiente y astuta, siempre dispuesta a ayudar a quien lo necesitara.
Junto a ella vivía su mejor amigo y compañero de aventuras, un hermoso unicornio blanco llamado Estrella. Un día, mientras paseaban por el bosque, escucharon unos gritos desesperados que venían de lejos.
Rápidamente se dirigieron hacia el lugar del que provenían los ruidos y encontraron a una familia de zorros atrapados en una red. Noelia no dudó ni un segundo en ayudarlos. Con su espada cortó la red y liberó a los zorros.
La familia de zorros estaba muy agradecida con la princesa guerrera y le ofrecieron llevarla hasta su hogar para darle las gracias adecuadamente. En el camino hacia la casa de los zorros, Noelia notó que algo extraño estaba sucediendo en el bosque. Los árboles estaban siendo talados sin control alguno.
Al llegar al hogar de los zorros, les preguntó si sabían quién podría estar detrás del daño al bosque. "Sí" -respondió uno de los pequeños zorritos-. "Hay un malvado ogro que vive en la cueva más profunda del bosque".
Noelia decidió investigar y enfrentarse al ogro para detenerlo antes de que siguiera causando más daño al bosque mágico. Con Estrella a su lado, se adentraron en lo más profundo del bosque hasta llegar a la cueva del ogro.
Allí lo encontraron, un enorme ser de aspecto feroz y malvado. "¿Por qué estás talando los árboles del bosque?" -preguntó Noelia con valentía. "Necesito la madera para construir mi castillo" -respondió el ogro con desprecio-.
"Pero no permitiré que una pequeña princesa guerrera me detenga". La batalla comenzó. El ogro era fuerte y poderoso pero Noelia era astuta y rápida. Con su espada logró darle algunos golpes al ogro, pero él también la hirió.
Estrella intervino en la lucha y junto a Noelia lograron vencer al ogro. La princesa guerrera lo dejó inconsciente y decidió llevarlo ante las autoridades del bosque para que fuera juzgado por sus acciones.
Después de ese día, el bosque volvió a recuperar su vida normal gracias a la valentía de Noelia. Ella se convirtió en un ejemplo para todos los habitantes del lugar, quienes aprendieron que siempre hay que luchar por lo que es justo y proteger nuestra naturaleza.
Desde entonces, cada vez que alguien necesitaba ayuda o se encontraba en peligro en el bosque mágico, sabían que podían contar con la pequeña princesa guerrera llamada Noelia y su fiel compañero Estrella.
FIN.