Ojos Luminosos

Jorge, Marta y Tomás, se encontraban desconcertados y preocupados. Su nave espacial, la Stardust, se había estrellado en ese extraño planeta. Se reunieron para evaluar la situación. Jorge, el piloto, era un joven valiente de ojos avellanados y cabello oscuro.

Marta, la científica, era una mujer curiosa con ojos color avellana y cabello cobrizo. Tomás, el ingeniero, era un hombre amable con ojos azules y cabello rubio.

Trabajaron juntos para reparar la nave, pero la falta de repuestos complicaba las cosas. Mientras buscaban alguna solución, descubrieron que el planeta estaba habitado por criaturas llamadas Luminis. Estas misteriosas criaturas tenían ojos luminosos que brillaban en la oscuridad, y poseían conocimientos avanzados sobre tecnología.

Los Luminis les ofrecieron ayuda para reparar la nave, a cambio de que los tripulantes les enseñaran sobre la amistad, la solidaridad y el cuidado del medioambiente. Durante días, compartieron experiencias y conocimientos, aprendiendo unos de otros.

Los Luminis, con sus ojos luminosos, demostraron la importancia de la cooperación y el respeto por el entorno. Finalmente, con la ayuda de los Luminis, la nave fue reparada, y los tripulantes se despidieron agradecidos. Antes de partir, prometieron regresar para seguir aprendiendo de sus nuevos amigos.

A medida que la Stardust despegaba, los ojos luminosos de los Luminis brillaban con alegría, iluminando su camino en el espacio. Emprendieron rumbo a nuevos destinos, con el corazón lleno de sabiduría y amistad.