Olivia y el sombrero perdido en Villa Feliz



Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Feliz, una hermosa bebita llamada Olivia.

Ella había nacido un 8 de julio y desde el primer momento en que llegó al mundo, sus papás Matías y Valen quedaron maravillados con su ternura y belleza. Los abuelos de Olivia, Luz, Vale y Pablo, no podían contener la emoción al ver a la nueva integrante de la familia.

También estaban los bisabuelos Nico y Mirta, quienes se derretían de amor cada vez que veían a la pequeña Olivia. Los tíos Toto, Oli y Jere eran muy especiales para Olivia. Siempre estaban dispuestos a jugar con ella, contarle cuentos e incluso hacer travesuras juntos.

Un día soleado en Villa Feliz, mientras Olivia jugaba en el jardín con sus tíos, sintieron un fuerte viento que empezó a soplar con fuerza. - ¡Toto! ¿Qué está pasando? -preguntó asustada Olivia.

- Tranquila Olivita, es solo el viento jugando también -respondió Toto intentando calmarla. Pero de repente, el viento se llevó volando el sombrero favorito de Olivia hacia el bosque cercano. Los tres tíos decidieron ir en busca del sombrero antes de que cayera la noche.

Caminaron por el bosque entre risas y juegos hasta que finalmente encontraron el sombrero atrapado en las ramas de un árbol muy alto. Toto intentó trepar para alcanzarlo pero le resultaba imposible.

- Chicos, creo que no podré llegar hasta allá arriba -dijo Toto algo desanimado. Fue entonces cuando Oli tuvo una brillante idea. Recordó que cerca vivía Don Manuel, un simpático anciano conocido por ser experto en trepar árboles altísimos. Decidieron ir a buscarlo y pedirle ayuda.

Don Manuel los escuchó atentamente y sin dudarlo un segundo se puso en marcha hacia el bosque junto a los tres intrépidos tíos y la risueña Olivia.

Con destreza y habilidad Don Manuel trepó rápidamente hasta lo más alto del árbol y rescató el sombrero de Olivia. La pequeña estaba feliz al recuperar su preciado tesoro gracias a la valentía y cooperación de todos.

De regreso a casa, celebraron con una gran merienda preparada por abuela Luz donde compartieron anécdotas divertidas sobre su aventura en el bosque. Fue un día inolvidable lleno de enseñanzas sobre trabajo en equipo, solidaridad y valentía.

Desde ese día en adelante, cada vez que soplaba fuerte el viento en Villa Feliz recordaban aquella aventura como un bello recuerdo que fortaleció aún más los lazos familiares entre todos ellos.

FIN.

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