Ona y Laia, Dos Hermanitas en Busca de la Armonía


Había una vez en una casa muy colorida y alegre, dos hermanitas llamadas Ona y Laia. Ona era una niña de 4 años con el pelo castaño claro y un flequillo travieso que le caía sobre la frente.

A pesar de ser muy dulce, a veces le costaba pedir perdón cuando se equivocaba. Por otro lado, estaba Laia, su hermana mayor de 7 años, rubia como el sol y con un flequillo tan brillante como su sonrisa.

Un día soleado, mientras jugaban en su habitación llena de juguetes coloridos, Ona tomó uno de los muñecos favoritos de Laia sin pedir permiso.

Laia, sorprendida por la actitud de su hermanita, le dijo con voz suave pero firme: "Ona, ¿por qué tomaste mi muñeco sin preguntar?". Ona bajó la mirada sintiéndose avergonzada por su acción. Sabía que había hecho algo malo al tomar el juguete de Laia sin pedirlo primero.

Sin embargo, en lugar de disculparse como debería haber hecho, respondió con un tono defensivo: "¡Pero yo también quería jugar con él!".

Laia suspiró comprensivamente y le dijo a su hermana menor: "Entiendo que querías jugar también, pero es importante pedir permiso antes de tomar las cosas de los demás. ¿Podrías devolverme mi muñeco y decir lo siento?". Ona reflexionó unos momentos mientras acariciaba el muñeco entre sus manos.

Finalmente, levantó la mirada hacia Laia y dijo tímidamente: "Lo siento mucho por tomar tu muñeco sin permiso, fue egoísta de mi parte". Laia sonrió con ternura y abrazó a su hermanita diciendo: "Gracias por disculparte, Ona.

Sé que a veces nos equivocamos todos, lo importante es aprender a reconocerlo y pedir perdón". Desde ese día, Ona comenzó a practicar más el hábito de pedir perdón cuando se equivocaba o lastimaba a alguien sin querer.

A medida que pasaban los días, las dos hermanas fortalecieron aún más su vínculo jugando juntas y compartiendo no solo sus juguetes sino también sus risas y aventuras.

Y así, entre juegos y risas, Ona aprendió una valiosa lección sobre la importancia del perdón y la humildad gracias al amoroso ejemplo de su hermana mayor Laia.

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