Pablo y Jacinto en el colegio
Pablo y Jacinto eran dos amigos muy traviesos que asistían al colegio San Martín. Siempre estaban metidos en problemas y no les gustaba prestar atención en clase.
Un día, la directora del colegio, la señorita Rosa, les llamó la atención por interrumpir la clase de matemáticas. - Pablo, Jacinto, están siempre metidos en líos, ¿no quieren cambiar su actitud? - les dijo la señorita Rosa con cara de preocupación.
Los chicos se miraron y asintieron, pero en el fondo no estaban muy convencidos. Esa misma tarde, mientras jugaban en el patio, se les acercó un nuevo compañero, Martín. Martín era tímido y tenía dificultades para hacer amigos.
Pablo y Jacinto, le reprocharon por ser nuevo y no saber jugar a la pelota. Martín se retiró muy triste. Al darse cuenta de lo que habían hecho, los chicos se sintieron mal y decidieron disculparse con él al día siguiente.
Al otro día, durante el recreo, se acercaron a Martín y le invitaron a jugar a la pelota. Martín aceptó feliz y desde ese día se volvieron inseparables. La señorita Rosa notó el cambio en la actitud de Pablo y Jacinto y les elogió por su amabilidad y comprensión.
A partir de ese momento, los tres amigos se esforzaron por ser mejores compañeros y estudiantes. Pablo, Jacinto y Martín se convirtieron en un ejemplo para los demás chicos del colegio y lograron formar un gran equipo.
A partir de ese día, el colegio San Martín se convirtió en un lugar donde la amistad, la solidaridad y el compañerismo reinaban en cada rincón.
FIN.