Panchito y el tesoro de la granja
Había una vez en una granja en lo alto de la montaña, un pollito llamado Panchito. Vivía con sus padres y siete hermanos, rodeado de animales como vacas, chivos, ovejas y un simpático ganzo.
Desde pequeño, Panchito soñaba con encontrar tesoros escondidos en lugares misteriosos. Un día, mientras una tormenta azotaba la montaña y todos los animales se resguardaban en el granero, Panchito decidió salir a explorar.
Sus hermanos le advirtieron que era peligroso aventurarse con ese clima tan adverso, pero el pollito valiente no tenía miedo. Panchito caminó entre relámpagos y truenos, sintiendo cómo las gotas de lluvia golpeaban su plumaje. De repente, vio algo brillar entre los árboles verdes del bosque cercano.
Sin dudarlo, se adentró en la oscuridad siguiendo aquella luz misteriosa. Entre ramas mojadas y hojas caídas encontró un cofre dorado lleno de joyas resplandecientes: oro y diamantes que centelleaban como estrellas en la noche.
Panchito no podía creer su suerte; ¡había encontrado un verdadero tesoro! Lleno de emoción y orgullo por su hallazgo, el pollito valiente regresó a la granja con el cofre en sus alas. Al llegar, sus hermanos lo miraron asombrados y preguntaron qué había pasado.
"¡Hermanitos! ¡Miren lo que encontré en medio de la tormenta! ¡Un tesoro escondido entre los árboles del bosque!", exclamó Panchito mostrando las preciosas joyas. Los hermanos del pollito valiente no podían creerlo.
Estaban impresionados por la valentía y determinación de Panchito para salir en busca de aventuras incluso en los momentos más difíciles. Se dieron cuenta de que su pequeño hermano no solo era audaz sino también astuto e inteligente.
"¡Eres increíble, Panchito! ¡Nunca imaginamos que encontrarías algo tan maravilloso!", dijeron los hermanos emocionados. A partir de ese día, Panchito se convirtió en el héroe de la granja. Todos los animales lo admiraban y seguían sus consejos sobre cómo enfrentar desafíos con coraje y determinación.
El pollito valiente les enseñó que a veces hay tesoros escondidos esperando ser descubiertos por aquellos dispuestos a arriesgarse.
Y así, entre cantos al amanecer y risas al atardecer, la granja en la montaña se llenó de historias sobre el increíble viaje del pollito valiente que desafió a una tormenta para encontrar un tesoro perdido.
Y aunque muchos años pasaron desde aquel día memorable, nadie olvidaría jamás las hazañas del intrépido Panchito: el pollo aventurero que demostró a todos lo valiente que puede ser un corazón dispuesto a soñar sin límites.
FIN.