Panchito y sus amigos peludos
En el Colegio San Luis Beltrán de Chinandega, todos los alumnos estaban emocionados porque llegaba un nuevo compañero muy especial: ¡un gato llamado Panchito que asistiría a clases junto a ellos! Panchito era un gatito blanco y negro muy travieso, pero también muy cariñoso.
Desde el primer día, Panchito se convirtió en la mascota favorita de todos. Siempre estaba presente en las clases, jugando con los lápices y ronroneando mientras los alumnos trabajaban en sus tareas.
La maestra, la señorita Ana, lo aceptó en el salón con una condición: todos debían cuidar de él y asegurarse de que estuviera feliz y sano. "Chicos, recuerden que tener una mascota es una gran responsabilidad.
Debemos darle amor, comida adecuada y llevarlo al veterinario regularmente", les recordaba la señorita Ana. Los niños entendieron la importancia del cuidado de Panchito y se comprometieron a cumplir con todas las indicaciones de su maestra.
Durante el recreo, lo alimentaban con su comida favorita y le construyeron una pequeña casita dentro del colegio para que pudiera descansar cómodamente. Un día, mientras jugaban en el patio del colegio, escucharon unos maullidos desesperados provenientes del árbol más alto.
Era Panchito, quien había subido demasiado alto y ahora no podía bajar. Los niños se preocuparon por su amigo felino e intentaron encontrar una solución. "¡Tranquilo Panchito! ¡Ya vamos a ayudarte!", gritó Martín mientras miraba hacia arriba.
Después de varios intentos fallidos por parte de los niños para rescatar a Panchito del árbol, decidieron pedir ayuda a Don José, el jardinero del colegio. Con mucha paciencia y habilidad, Don José logró subir al árbol y traer de vuelta a Panchito sano y salvo.
"¡Gracias Don José! ¡Eres un héroe!", exclamaron los niños emocionados al ver a su amigo gatuno a salvo nuevamente. A partir de ese día, los niños comprendieron aún más la importancia del cuidado responsable de las mascotas.
Aprendieron que estar al lado de un ser vivo implica velar por su bienestar en todo momento. Y así, entre risas y aventuras junto a Panchito, vivieron momentos inolvidables en el Colegio San Luis Beltrán de Chinandega.
FIN.