Paola y las cuentas mágicas de Don Manuel

Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Feliz, una niña llamada Paola. Paola era una niña muy curiosa y valiente, pero tenía un miedo enorme a las operaciones matemáticas, especialmente a la suma y resta.

Un día, su mamá le pidió que fuera al mercado a comprar algunas frutas y verduras.

Paola se emocionó con la idea de poder ayudar en casa, pero al recordar que tendría que enfrentarse a las operaciones matemáticas para pagar, sintió un nudo en el estómago. Con paso vacilante, Paola se encaminó hacia el mercado. Al llegar, se encontró con Don Manuel, el amable dueño del puesto de frutas y verduras.

Él notó la expresión preocupada de Paola y decidió ayudarla. "Hola Paola, ¿cómo estás hoy?" -saludó Don Manuel con una sonrisa. "Hola Don Manuel... estoy bien... " -respondió Paola tímidamente. "¿Necesitas algo en especial hoy?" -preguntó Don Manuel mientras seleccionaba unas manzanas jugosas para ella.

Paola suspiró y confesó: "Tengo miedo de no poder hacer las cuentas para pagar... "Don Manuel la miró comprensivamente y le dijo: "No te preocupes, yo te ayudaré a hacer las cuentas.

Verás que no es tan difícil como parece". Así comenzaron a seleccionar juntos las frutas y verduras que necesitaba Paola. Cada vez que elegían un producto, Don Manuel le mostraba a Paola cómo sumar o restar los precios para saber cuánto dinero debía pagar.

Poco a poco, Paola fue perdiendo el miedo a las operaciones matemáticas. Se dio cuenta de que podía resolverlas con la ayuda de Don Manuel e incluso empezó a disfrutar del desafío.

Al finalizar sus compras, Paola estaba radiante de felicidad al comprobar que podía superar su miedo. "¡Gracias por tu ayuda, Don Manuel! Ahora sé que puedo vencer mi miedo a las operaciones" -dijo Paola emocionada. "De nada, querida.

Siempre recuerda que no hay nada imposible cuando tienes ganas de aprender" -respondió Don Manuel con orgullo. Desde ese día en adelante, cada vez que iba al mercado, Paola practicaba sus habilidades matemáticas con entusiasmo. Se convirtió en una experta calculando precios y dando vuelto sin temor alguno.

Y así, gracias al apoyo de Don Manuel y su propia determinación, Paola demostró que cualquier obstáculo puede ser superado si se enfrenta con valentía y perseverancia.

Nunca más volvió a temerle a las operaciones matemáticas ¡y hasta llegó a convertirse en la mejor pequeña compradora del pueblo!