Pasos de Amistad



Había una vez en la hermosa ciudad de Chocpe, un colegio muy especial llamado Colegio Nazareno. Este año, el colegio cumplía 51 años y todos estaban emocionados por celebrar su aniversario.

Los estudiantes, los profesores y los padres de familia se unieron para organizar una gran verbena llena de actividades divertidas. El día del aniversario llegó y el colegio estaba decorado con globos de colores y guirnaldas brillantes.

Había mesas llenas de comida deliciosa: empanadas, pizzas, helados y tortas. Todos estaban listos para disfrutar de esta gran fiesta. La directora del colegio, la señorita Laura, dio inicio a las celebraciones con un discurso lleno de orgullo por los logros alcanzados durante estos 51 años.

Luego anunció que habría muchas actividades para disfrutar durante toda la tarde. En uno de los salones se encontraba Sofía, una niña muy curiosa e inquieta que siempre estaba buscando nuevas aventuras.

Ella había decidido participar en el concurso de baile que se llevaría a cabo más tarde. Estaba practicando sus mejores movimientos cuando escuchó a alguien llamarla desde afuera. Sofía salió corriendo del salón y vio a su amiga Luciana esperándola con una sonrisa en el rostro.

"¡Sofía! Ven rápido, hay algo increíble que quiero mostrarte", exclamó Luciana emocionada. Las dos amigas caminaron hacia el patio trasero del colegio donde encontraron a un grupo de bailarines ensayando una coreografía espectacular.

Sofía y Luciana se quedaron maravilladas por los movimientos graciosos y llenos de energía. "-¡Wow, esto es increíble! ¿Te imaginas poder bailar así?" dijo Sofía emocionada. "-Sí, sería genial", respondió Luciana mientras soñaba con estar en el escenario algún día.

De repente, una mujer se acercó a ellas. Era la profesora de danza del colegio, la señorita Carolina. "¿Les gustaría aprender a bailar como ellos?", preguntó sonriente.

Las dos amigas asintieron emocionadas y comenzaron a tomar clases de baile con la señorita Carolina. Durante semanas practicaron sin descanso, aprendiendo diferentes estilos de danza: salsa, hip-hop, ballet y más. Se esforzaban mucho porque querían hacerlo bien en el concurso de baile de la verbena. Finalmente llegó el gran día.

El escenario estaba listo y las luces brillaban intensamente sobre él. Sofía y Luciana estaban nerviosas pero también emocionadas por mostrar todo lo que habían aprendido.

Cuando llegó su turno, subieron al escenario con confianza y comenzaron a bailar una mezcla de ritmos que habían creado ellas mismas. Los aplausos no se hicieron esperar y todos en el público las animaban con entusiasmo. Al finalizar su presentación, Sofía y Luciana vieron a sus padres entre el público.

Tenían lágrimas en los ojos y les mostraban orgulloso sus pulgares hacia arriba para felicitarlas. La noche continuó llena de música, risas y diversión. Hubo presentaciones de cantantes, juegos y bailes para todos los gustos.

Los niños y niñas del Colegio Nazareno disfrutaron al máximo de esta verbena tan especial. Sofía y Luciana entendieron que cuando uno se esfuerza y trabaja duro por alcanzar sus sueños, puede lograr cualquier cosa.

Aprendieron el valor de la perseverancia, la amistad y la importancia de nunca rendirse. Y así, el colegio Nazareno celebró su 51 aniversario con una gran fiesta llena de alegría y enseñanzas para todos.

FIN.

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