Pedro y las técnicas de atención plena
Pedro era un niño muy inquieto, siempre se enojaba con facilidad y a veces, no podía controlar su rabia.
Un día, su abuelita le habló sobre las técnicas de atención plena, una forma de controlar las emociones y encontrar la calma interior. Intrigado, Pedro decidió aprender más sobre estas técnicas e implementarlas en su vida diaria. Con la ayuda de su abuelita, Pedro practicó la meditación, la respiración profunda y el enfoque en el presente.
Poco a poco, Pedro comenzó a notar cambios en su forma de reaccionar ante las situaciones que lo enfurecían. Ya no respondía con impulsividad, sino que tomaba un momento para respirar y pensar en soluciones pacíficas.
Sus amigos notaron la diferencia y pronto, Pedro se convirtió en un ejemplo de calma y control. Desde entonces, compartía sus conocimientos sobre la atención plena con quienes lo necesitaban, ayudando a más personas a encontrar la paz interior.
FIN.