Pepa Pig y Jork en la plaza
Pepa Pig y su hermano Jork estaban emocionados porque iban a pasar la tarde en la plaza junto a su familia. Cuando llegaron, se encontraron con muchos juegos, columpios y toboganes.
Pepa y Jork no podían contener su emoción y corrieron directo a los columpios. - ¡Qué divertido es esto, Jork! - exclamó Pepa mientras se balanceaba. - Sí, Pepa, ¡es genial! - respondió Jork riendo.
Después de jugar un rato, vieron a unos niños intentando subir a un tobogán muy alto, pero ninguno lo lograba. Pepa y Jork se acercaron y les dijeron: - ¡Podemos ayudarlos! Juntos empujaron el tobogán y los niños pudieron subir y deslizarse. Los demás niños los miraron impresionados.
La mamá de Pepa y Jork, muy orgullosa, les dijo: - ¡Qué lindo gesto, mis amores! ¡Se han ganado un helado! Pepa y Jork aprendieron que ayudar a los demás es importante y que puede hacer felices a muchas personas.
La tarde en la plaza fue inolvidable y llena de nuevas amistades. Al volver a casa, Pepa y Jork se abrazaron felices, sabiendo que habían hecho algo bueno.
FIN.