Perro Glotón y los huesos sabrosos



Había una vez un perro llamado Glotón, que tenía fama de ser el más glotón del barrio. Un día, mientras paseaba por el parque, encontró una bolsa llena de huesos sabrosos.

Sin embargo, antes de comenzar a comer, apareció el viejo y sabio Conejo Saltarín. "¡Oh, Glotón! Esos huesos son mágicos y traen poderes especiales a quien los come. Pero debes tener cuidado, solo podrás usar esos poderes para hacer el bien", advirtió el conejo.

Glotón, con su estómago rugiendo, no le prestó atención y devoró todos los huesos. De repente, sintió una extraña energía recorrer su cuerpo y descubrió que podía hablar con otros animales. Emocionado, decidió usar sus nuevos poderes para ayudar a quienes lo necesitaran.

En su primer acto de bondad, ayudó a rescatar a un gatito atrapado en un árbol. A medida que pasaban los días, Glotón se convirtió en el héroe del barrio, salvando a animales y personas con sus habilidades especiales.

Finalmente, comprendió la importancia de usar sus poderes para el bien de todos. Y así, el perro glotón aprendió que la verdadera grandeza está en el servicio a los demás.

FIN.

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