Rapunzel y los cuentos del bosque

Rapunzel era una joven con un largo y brillante cabello que llegaba hasta sus pies. Vivía en un pequeño claro del bosque, rodeada de árboles, flores y animales que parecían entenderla.

Rapunzel tenía el don de hablar con los animales, y pasaba sus días contándoles cuentos maravillosos. -Hola, queridos amigos del bosque -saludaba Rapunzel a los pajaritos que revoloteaban a su alrededor. -Hoy les contaré la historia del valiente conejito que logró salvar a todos sus amigos del peligro.

Los animalitos se acercaban para escuchar con atención cada relato de Rapunzel, quien además les enseñaba valiosas lecciones sobre la amistad, el coraje y la bondad.

Un día, una malvada bruja que habitaba en el bosque, celosa del don de Rapunzel, decidió secuestrarla y ocultarla en lo alto de una torre. La bruja cortó el cabello de Rapunzel, impidiéndole hablar con los animales. Pero Rapunzel, con su ingenio, logró hacerse amiga de una familia de pájaros que la visitaban a diario.

Juntos planearon una estrategia para escapar de la torre y volver al bosque. Con valentía y astucia, Rapunzel y sus amigos alados lograron vencer los obstáculos de la bruja y regresar al claro del bosque.

Una vez allí, la magia del lugar devolvió a Rapunzel su largo cabello y su habilidad para hablar con los animales. Desde ese día, Rapunzel siguió contando sus cuentos a sus amigos del bosque, y la malvada bruja desapareció para siempre.

La moraleja de esta historia es que la valentía, la amistad y la bondad siempre prevalecerán, incluso en los momentos más oscuros.