Rita, la conejita especial

Había una vez en el bosque Encantado, una conejita llamada Rita. Era diferente a las demás conejitas, tenía un pelaje de colores brillantes y ojos grandes y curiosos que siempre buscaban nuevas aventuras.

Sus orejas eran más largas que las de los demás conejos y sus patitas eran ágiles y veloces. Desde pequeña, Rita había sido rechazada por los otros animales del bosque por ser tan distinta.

Siempre se burlaban de ella y le decían cosas hirientes como "¡Mira a la conejita rara!" o "¡Esa no es como nosotras!".

A pesar de todo, Rita no se dejaba vencer por el desánimo, su espíritu era fuerte y estaba decidida a demostrarles a todos que ser diferente era algo maravilloso. Un día, mientras exploraba el bosque en busca de bayas para comer, Rita escuchó unos gritos desesperados provenientes del lago cristalino.

Se acercó corriendo y vio a un pajarito atrapado entre las ramas de un árbol que estaba a punto de caer al agua. Sin dudarlo ni un segundo, Rita saltó con agilidad y logró atrapar al pajarito justo antes de que cayera al lago.

El pajarito le dio las gracias emocionado y le dijo: "-¡Eres increíble! ¡Nunca pensé que una conejita tan especial como tú me salvaría la vida!". Rita sonrió con ternura y le respondió: "-En este bosque todos somos importantes, sin importar nuestras diferencias".

Desde ese día, la noticia sobre la valentía de Rita se extendió por todo el bosque Encantado. Los animales ya no la veían como la conejita rara, sino como una heroína dispuesta a ayudar a quien lo necesitara.

Incluso aquellos que antes se habían burlado de ella ahora le pedían consejos o simplemente querían pasar tiempo junto a ella. Rita les enseñó con su ejemplo que cada uno es único en su forma y eso es lo que nos hace especiales.

Que la verdadera belleza está en aceptarnos tal como somos y en valorar las diferencias de los demás. Y así, La Conejita Rita la diferente se convirtió en un símbolo de amor, amistad e inclusión en el bosque Encantado.

Y colorín colorado, este cuento ha terminado. Porque La Conejita Ritademostró que ser diferente es bonitoy siempre será bien recibidoen cualquier lugar del mundo encantado.