Saltos de Amistad

En un hermoso bosque llamado Salto en Salto vivía Pedro, un conejo muy curioso y travieso.

Un día, Pedro decidió salir de su casa para ir a la escuela, pero en el camino se desvió y terminó perdiéndose en medio del bosque. Pedro saltaba de un lado a otro, intentando encontrar su camino de regreso a casa, pero entre tanta vegetación y árboles parecía imposible.

El sol comenzaba a esconderse en el horizonte y las sombras se alargaban por el bosque. Pedro empezó a sentir miedo y tristeza al darse cuenta de que estaba perdido.

- ¡Oh no! ¿Cómo voy a hacer para volver a mi hogar? - exclamaba Pedro mientras sus ojos llenos de lágrimas miraban a su alrededor. De repente, entre los arbustos apareció Martina, una ardilla muy amigable que había notado la tristeza de Pedro. - ¿Qué te pasa, amigo conejo? - preguntó Martina con voz dulce.

- Me he perdido en este gran bosque y no sé cómo regresar a casa. Estoy muy asustado - respondió Pedro con voz temblorosa. Martina sonrió cálidamente y le dijo: "No te preocupes, yo te ayudaré a encontrar el camino de vuelta.

Pero primero debemos mantener la calma". Así fue como Martina guió a Pedro por senderos desconocidos, sorteando obstáculos y superando desafíos juntos. Mientras caminaban, Martina le contaba historias divertidas para animar el corazón de Pedro y hacerle olvidar sus miedos.

- ¡Mira allá! - exclamó Martina señalando hacia adelante - ¡Esa es tu casa! Pedro sintió una alegría inmensa al ver su madriguera nuevamente frente a él. Se abalanzó sobre Martina para darle un fuerte abrazo como muestra de gratitud.

- ¡Muchas gracias por ayudarme! Nunca olvidaré tu bondad - dijo Pedro emocionado. Desde ese día, Pedro aprendió la importancia de pedir ayuda cuando lo necesitaba y valorar la amistad sincera como la de Martina.

Juntos comprendieron que los obstáculos pueden superarse si se enfrentan con valentía y apoyo mutuo. Y así, entre risas y aventuras, Pedro continuó explorando el bosque junto a su nueva amiga Martina, recordando siempre que nunca está solo cuando tiene buenos amigos cerca.