Sammy el Erizo Valiente
Sammy era un erizo simpático y curioso que asistía a la escuela del bosque. Sin embargo, sus compañeros de clase se burlaban de él por tener espinas, lo que lo ponía muy triste. Un día, luego de ser objeto de burlas, Sammy decidió hablar con la consejera escolar, la señora Lechuza. Ella lo escuchó con atención y le dio un consejo:
- Sammy, tus espinas son parte de lo que te hace especial. En lugar de esconderlas, debes aprender a valorarlas y a mostrarle a todos lo valioso que eres con o sin ellas.
Inspirado por las palabras de la señora Lechuza, Sammy decidió demostrarles a sus compañeros que ser diferente no era algo malo. Durante la hora del recreo, en lugar de esconderse, comenzó a realizar increíbles acrobacias saltando entre las ramas de los árboles, demostrando su destreza y agilidad. Sus compañeros no podían creer lo que veían y poco a poco, empezaron a aplaudirlo. Sammy les sonrió y les dijo:
- Como ven, mis espinas no me impiden hacer cosas increíbles. Son parte de quién soy, al igual que lo que ustedes son. Todos somos únicos y especiales a nuestra manera.
A partir de ese día, Sammy se convirtió en un ejemplo de valentía y aceptación en la escuela del bosque. Sus compañeros dejaron de burlarse de él y empezaron a valorarlo por su autenticidad. Y así, Sammy entendió que no hay nada más valioso que ser uno mismo.
FIN.