Shin Sonic y el Planeta Vacío
Había una vez en un mundo lleno de colores y risas, un pequeño lugar donde vivían criaturas divertidas y amigables. Sin embargo, un día un ser misterioso llamado Shin Sonic decidió que quería ser el rey del mundo. Para lograrlo, hizo algo muy extraño: se comió a todas las personas del mundo. Pero no fue una comida cualquiera, sino una comida llena de travesuras y confusión.
Shin Sonic, con su estómago repleto de risas, se dio cuenta que no podía disfrutar del mundo vacío. En lugar de sentirse feliz, comenzó a sentir una profunda soledad. Miró a su alrededor y sólo había silencio.
"- ¿Por qué no puedo disfrutar de ser el rey?" se preguntó.
En su soledad, decidió salir a pasear por el mundo que había dejado atrás. Paseó por las calles vacías, miró a su alrededor y se dio cuenta de que los colores se habían desvanecido.
"- ¡Esto no puede ser!" exclamó, llenando el aire con su voz melancólica.
Mientras tanto, en un rincón del mundo imaginario, un grupo de pequeños animales se unió para pensar en cómo devolver a las personas.
"- No podemos dejar que Shin Sonic se quede con nuestra alegría!" dijo un pequeño conejo llamado Rufus.
"- Sí, tenemos que encontrar la manera de hacer que las personas regresen y que Shin Sonic entienda su error," agregó Lina, una curiosa ardilla.
"¿Y cómo lo hacemos?" preguntó Francisco, el sabio búho.
"¡Con un gran plan!" gritó Rufus.
Los pequeños amigos, decidieron hacer un gran señalador en el cielo, utilizando hojas de colores brillantes y flores. Cuando Shin Sonic se dio cuenta de lo que estaban haciendo, voló hacia ellos, muy curioso.
"- ¡¿Qué están haciendo? !" preguntó sorprendido.
"Estamos llamando a las personas para que vuelvan, y para que entiendan que tu trampa no funciona," respondió Lina con valentía.
Shin Sonic, sintiéndose un poco culpable, escuchó a los pequeños amigos.
"- No sabía que estar solo era tan triste. Quería ser grande, como un rey, pero no sabía cómo hacerlo con todos ustedes aquí. Estoy muy arrepentido", dijo.
Los amigos le sonrieron y lo invitaron a unirse a ellos.
"- ¡Ser rey no significa estar solo!" dijeron juntos.
Shin Sonic, entonces, decidió que podía usar su energía especial para hacer sonar una melodía mágica que convocaría a todos los habitantes que se habían ido. Y así, comenzó a cantar una canción llena de alegría.
A medida que su melodía recorría el mundo vacío, las personas comenzaron a asomarse. Las risas, que habían desaparecido, comenzaron a regresar.
-Pronto, la gente se unió nuevamente, pintando las calles con colores vivos y llenando el aire de risas.
Al final, Shin Sonic entendió que no necesitaba ser el rey solo, sino un amigo de todos.
"- Gracias, amigos, por mostrarme el verdadero significado de la felicidad. Juntos podemos hacer del mundo un lugar mejor."
Desde ese día, Shin Sonic se convirtió en un gran protector del mundo y sus habitantes.
"- ¡Y nunca más me comeré a la gente!" exclamó con una gran sonrisa, mientras sus amigos reían y celebraban a su lado.
Y así, el pequeño mundo lleno de colores y alegrías volvió a brillar, y Shin Sonic aprendió que la amistad es el mejor poder de todos.
Y así, vivieron felices para siempre, haciendo del mundo un lugar lleno de risas y amor. La verdadera realeza se encuentra en estar rodeado de amigos y de felicidad.
¡!
FIN.