Simón y el vuelo de la libertad



Había una vez en un lejano bosque de Venezuela, un pequeño simoncito llamado Simón, quien tenía un gran amor por la libertad y la justicia.

Todos los días recorría el bosque junto a su amigo el pajarito turpial, cantando canciones alegres y disfrutando de la naturaleza. Un día, mientras paseaban por el bosque, escucharon unos gritos desgarradores que provenían de una cabaña cercana. Sin dudarlo, Simón y el turpial volaron hacia allí para ver qué sucedía.

Descubrieron que dentro de la cabaña había esclavos africanos trabajando sin descanso para un hombre malvado y cruel. Al ver aquella injusticia, Simón sintió arder en su pecho el fuego de la indignación.

Decidió que no podía quedarse de brazos cruzados viendo cómo aquellos seres humanos eran tratados como siervos. El turpial también estaba decidido a ayudar a sus amigos esclavos.

"¡Debemos hacer algo para liberar a estos pobres esclavos! ¡No podemos permitir que sigan siendo explotados de esta manera!", exclamó Simón con determinación. El turpial asintió con energía y juntos idearon un plan para liberar a los esclavos.

Durante días se prepararon, observando los movimientos del hombre malvado y buscando la mejor manera de poner fin a aquella injusticia. Finalmente, llegó el día del rescate. Mientras el hombre malvado dormía plácidamente en su cama, Simón y el turpial lograron abrir las puertas de las celdas donde estaban encerrados los esclavos.

Con mucho cuidado los guiaron fuera de la cabaña hacia la libertad.

Cuando los primeros rayos del sol iluminaron aquel momento tan esperado, Simón alzó su voz con fuerza:"¡Es hora de ser libres! ¡Nunca más permitiremos que alguien les quite su dignidad y libertad!"Los esclavos miraron con gratitud al valiente simoncito y al fiel turpial que habían arriesgado todo por ellos. Juntos emprendieron un camino hacia una nueva vida llena de esperanza y oportunidades.

Desde ese día en adelante, Simón se convirtió en un símbolo de valentía y lucha por la libertad en todo el bosque. Y el pajarito turpial siempre lo acompañaba en cada aventura recordándole que juntos podían lograr grandes cosas cuando se luchaba por una causa justa.

Y así, gracias al amor incondicional por la libertad y la solidaridad entre amigos diferentes pero igualmente comprometidos con la justicia, lograron cambiar vidas para siempre e inspirar a todos los habitantes del bosque a seguir luchando por un mundo mejor donde reine la igualdad y el respeto mutuo.

FIN.

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