Sir Martín, el valiente escudero
Había una vez en un reino lejano, en plena época medieval, un joven escudero llamado Martín. Martín era valiente, astuto y siempre estaba dispuesto a ayudar a los demás.
Vivía en el castillo del rey junto a su familia y se encargaba de cuidar los caballos y las armaduras de los caballeros. Un día, mientras paseaba por el mercado del pueblo, Martín escuchó gritos de auxilio provenientes de la plaza central.
Se acercó corriendo y vio que un grupo de bandidos estaba atacando a los aldeanos y robando sus pertenencias. Sin dudarlo un segundo, Martín desenvainó su espada y se enfrentó a los malhechores.
"¡Alto ahí! ¡Dejen en paz a estos inocentes!" -gritó Martín con valentía. Los bandidos se rieron al ver a aquel joven escudero desafiándolos, pero Martín no retrocedió. Con habilidad y destreza logró derrotar uno por uno a los maleantes, hasta que finalmente huyeron despavoridos.
Los aldeanos, agradecidos, rodearon a Martín para felicitarlo por su valentía. El anciano herrero del pueblo se acercó y le dijo:"Martín, has demostrado ser un verdadero héroe hoy. Tu coraje y tu nobleza nos han salvado a todos.
"Martín sonrió humildemente y respondió: "Solo hice lo que cualquier buen escudero haría en mi lugar. Estoy aquí para proteger a quienes lo necesitan. "El rey del castillo, que había sido informado de la valentía de Martín, decidió honrarlo nombrándolo caballero real.
Así fue como el joven escudero se convirtió en Sir Martín, un honor que jamás habría imaginado alcanzar.
A partir de ese día, Sir Martín recorrió el reino ayudando a los más necesitados y luchando contra la injusticia donde quiera que esta se presentara. Su historia se convirtió en leyenda y su ejemplo inspiró a muchos jóvenes a seguir sus pasos.
Y colorín colorado este cuento medieval ha terminado, pero la valentía y la bondad de Sir Martín perdurarán por siempre en las tierras del reino.
FIN.