Sofía, la niña de las mariposas

Sofía era una niña muy curiosa y siempre estaba rodeada de mariposas. Le encantaba observarlas, cuidarlas y aprender sobre su ciclo de vida. Un día, mientras jugaba en el jardín, se encontró con una mariposa herida.

Sofía la cuidó con mucho amor y paciencia, alimentándola con néctar de las flores. Para su sorpresa, la mariposa sanó y revoloteó alegremente. Sofía se sintió feliz al verla recuperada. Poco después, mientras dormía, tuvo un sueño mágico donde las mariposas le hablaban.

Le contaron que su amor y cuidado las habían protegido a todas, y que ellas querían enseñarle algo especial. Al despertar, Sofía descubrió que podía entender el lenguaje de las mariposas.

Con su nuevo don, ayudó a resolver problemas en el jardín y en el bosque cercano. Pronto se convirtió en la protectora de las mariposas y otros seres mágicos del lugar. Sofía aprendió que la paciencia, el amor y la comprensión podían crear un mundo más hermoso.

Y así, cada tarde, se reunía con las mariposas para escuchar sus historias y aprender de la magia de la naturaleza.