Sofía y el hada del despertar
Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Mañana, una niña llamada Sofía. Sofía era una niña muy alegre y curiosa, pero tenía un problema: siempre llegaba tarde a la escuela porque no lograba levantarse temprano.
Un día, la maestra le dijo a Sofía: "Sofía, es importante que te levantes temprano para llegar a tiempo a la escuela y así poder aprender todo lo que necesitas".
Pero por más que lo intentaba, Sofía seguía acostándose tarde y levantándose tarde. Un hada madrina que vivía en el bosque cercano se enteró del problema de Sofía y decidió ayudarla.
Una mañana, mientras Sofía dormía profundamente, el hada madrina entró en su habitación y con un toque de su varita mágica hizo que la habitación se llenara de luces brillantes y colores hermosos. Al despertar, Sofía se sorprendió al ver su habitación tan hermosa y llena de energía.
El hada madrina le dijo: "Sofía, he venido para ayudarte a cambiar tu hábito de sueño. A partir de hoy, cada vez que te acuestes temprano y te levantes temprano, tu habitación se llenará de magia y alegría".
Sofía decidió seguir el consejo del hada madrina y poco a poco fue cambiando su rutina. Se acostaba temprano todas las noches y al despertar temprano veía cómo su habitación se llenaba de luces brillantes y colores hermosos.
Un día, cuando llegó a la escuela puntual por primera vez, todos sus compañeros la felicitaron y la maestra le dio un abrazo diciendo: "¡Estoy muy orgullosa de ti, Sofía! Has demostrado que con esfuerzo y constancia se pueden lograr grandes cambios".
Desde ese día en adelante, Sofía siguió manteniendo su nuevo hábito de sueño. Ya no llegaba tarde a la escuela, estaba más atenta en clase y tenía mucha más energía para jugar con sus amigos después de clases.
Y así, gracias a la ayuda del hada madrina y su propia determinación, Sofía aprendió la importancia de tener buenos hábitos de sueño ¡y vivieron felices para siempre en Villa Mañana!
FIN.