Sofía y el Jardín de la Solidaridad

Había una vez en un pequeño pueblo en las afueras de Buenos Aires, una niña llamada Sofía. Sofía era una niña muy curiosa y siempre estaba buscando nuevas aventuras para vivir.

Un día, mientras paseaba por el bosque cercano a su casa, descubrió un árbol mágico que brillaba con una luz especial.

Intrigada, se acercó al árbol y escuchó una voz suave que le decía:- ¡Hola, soy el Árbol de los Sueños! ¿Qué es lo que más deseas en la vida? Sofía quedó sorprendida al escuchar hablar al árbol y pensó por un momento en su respuesta. Finalmente, dijo emocionada:- Yo quiero ser capaz de ayudar a los demás y hacer del mundo un lugar mejor.

El Árbol de los Sueños sonrió y le dijo a Sofía que para lograr su deseo debía emprender un viaje hacia lo desconocido.

Le entregó una varita mágica y le explicó que cada vez que hiciera una buena acción, la varita se iluminaría un poco más. Así comenzó la aventura de Sofía. En su camino se encontró con varios desafíos donde tuvo que demostrar su valentía, generosidad y amistad.

Encontró a animales necesitados a los cuales les brindó comida y refugio, ayudó a ancianos a cruzar la calle y compartió juguetes con niños menos privilegiados. Cada vez que realizaba una buena acción, la varita mágica se iluminaba más y más.

Sofía sentía mucha alegría al ver cómo sus acciones estaban haciendo del mundo un lugar mejor. Pero no todo serían cosas fáciles en este viaje. Sofía también tuvo que enfrentarse a pruebas difíciles donde puso a prueba su paciencia y determinación.

En esos momentos recordaba las palabras del Árbol de los Sueños: "La verdadera magia está dentro de ti". Finalmente, después de muchas aventuras y aprendizajes, Sofía regresó al Árbol de los Sueños.

La varita mágica brillaba intensamente y el árbol le dijo con orgullo:- Has demostrado tener un corazón noble y valiente. Eres digna de cumplir tu sueño de hacer del mundo un lugar mejor.

En ese momento, el Árbol de los Sueños concedió el deseo final de Sofía: convertirla en la guardiana del bosque para proteger a todos sus habitantes. Desde ese día en adelante, Sofía velaría por el bienestar del bosque y seguiría ayudando a quienes lo necesitaran con amor y bondad en su corazón.

Y colorín colorado este cuento ha terminado pero recuerda siempre llevar contigo esa actitud positiva como nuestra protagonista hasta pronto..