Sofía y el misterio del payaso malo
Había una vez una niña llamada Sofía, a la que le encantaba jugar en el parque cerca de su casa. Un día, mientras Sofía jugaba en el parque, vio a un payaso malo que estaba asustando a los niños.
Sofía se acercó valientemente al payaso y le preguntó por qué estaba asustando a todos. El payaso malo le explicó que se sentía triste porque había olvidado cómo hacer reír a la gente, y por eso estaba tratando de asustarlos.
Sofía sintió compasión por el payaso y le propuso ayudarlo a recordar cómo hacer reír a la gente.
Así comenzó una aventura emocionante en la que Sofía y el payaso malo recorrieron el pueblo en busca de ideas para hacer reír a la gente. Juntos, organizaron un espectáculo de payasos en el parque, donde el payaso malo demostró que todavía podía hacer reír a todos.
Al final, el payaso malo aprendió a valorar el regalo de hacer reír a la gente, y Sofía descubrió que la amabilidad y la compasión pueden cambiar a las personas para mejor.
FIN.