Sofía y la búsqueda del tesoro perdido
En una ciudad muy colorida, vivían seis amigos que siempre estaban juntos. Sofía, la más pequeña y aventurera del grupo, adoraba jugar a las escondidas con sus amigos. Un día, decidieron jugar en el parque, entre los árboles y columpios.
Todos se escondieron, pero cuando llegó el momento de buscar a los demás, Sofía no pudo encontrar a ninguno de sus amigos. Empezó a llamarlos, pero nadie respondía.
Asustada, corrió de un lado a otro buscando, pero todos parecían haber desaparecido. Decidió buscar pistas y recorrer el parque en busca de sus amigos, pero no lograba encontrar ninguna pista. Después de un rato, se encontró con un perrito callejero muy simpático llamado Pancho.
-Hola Pancho, ¿has visto a mis amigos? Estoy muy preocupada, no los encuentro en ningún lado -dijo Sofía con voz temblorosa. Pancho, moviendo la cola, parecía entenderla y la condujo a través de un camino que Sofía no conocía.
Siguiendo al perrito, llegaron a un lugar del parque que no habían explorado antes. Allí, Sofía se sorprendió al ver a sus amigos preparando una sorpresa para ella. Le habían organizado una búsqueda del tesoro como regalo de cumpleaños anticipado.
Todos juntos disfrutaron de una tarde llena de risas y juegos. Desde ese día, Sofía aprendió que, a veces, cuando nos sentimos perdidos, es importante buscar ayuda y mantener la calma, porque a menudo las soluciones están más cerca de lo que creemos.
FIN.