Sofía y las almohadas mágicas



Era una mañana soleada en el tranquilo pueblo de Villa Cama. La pequeña Sofía se despertó con un brinco, pero al intentar levantarse de la cama, ¡zas! Se resbaló y cayó al suelo.

"¡Ay, qué dolor!", exclamó Sofía mientras se frotaba la cabeza. Su mamá entró corriendo a la habitación al escuchar el estruendo y vio a Sofía sentada en el suelo con los ojos llorosos. "¿Qué pasó, mi amor? ¿Estás bien?", preguntó preocupada su mamá.

Sofía asintió con tristeza y respondió: "Me caí de la cama, mamá. ¡Fue un accidente!"Su mamá la ayudó a levantarse y le dio un abrazo reconfortante. Luego le dijo: "No te preocupes, Sofi.

A veces los accidentes pasan, lo importante es cómo reaccionamos ante ellos.

"Sofía se secó las lágrimas y preguntó: "¿Y qué puedo hacer para que no vuelva a pasar?"Su mamá sonrió y le sugirió: "Podemos poner almohadas en el suelo al lado de tu cama por si acaso te vuelves a caer. Así te sentirás más segura. "Sofía asintió emocionada con la idea y juntas armaron un montón de almohadas junto a la cama.

Desde ese día, Sofía dormía tranquila sabiendo que si volvía a caerse, las almohadas estarían ahí para protegerla. Pero un día, algo inesperado sucedió. Mientras jugaba en su habitación, vio desde la ventana a un pajarito atrapado en una rama del árbol del jardín.

"¡Mamá, mamá! ¡Hay un pajarito que necesita ayuda!", gritó Sofía emocionada. Su mamá corrió hacia ella y juntas idearon un plan para rescatar al pajarito.

Usando las almohadas como colchón improvisado, lograron atrapar al pajarito cuando este finalmente se soltó de la rama. El pajarito salió volando libre hacia el cielo azul y Sofía sonreía radiante de felicidad. "¡Lo logramos! ¡Gracias por enseñarme a ser valiente y pensar rápido como las almohadas!", exclamó Sofía abrazando a su mamá.

Desde ese día, Sofía aprendió que los accidentes pueden convertirse en oportunidades para ayudar a otros si mantenemos la calma y buscamos soluciones creativas.

Y así continuaron viviendo aventuras juntas en Villa Cama, donde cada desafío era solo el comienzo de una nueva historia por descubrir.

FIN.

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