Sofía y las Vocales en Inglés


Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Alegre, una niña llamada Sofía. Sofía era muy curiosa y le encantaba aprender cosas nuevas todos los días.

Un día, mientras jugaba en el parque con sus amigos, escuchó a unos niños mayores hablando en inglés. Sofía se acercó y les preguntó qué significaban algunas palabras que estaban diciendo. Los niños mayores sonrieron y le explicaron que estaban practicando las vocales en inglés.

"Las vocales son A, E, I, O, U", dijeron los niños. Sofía quedó fascinada con la idea de aprender un nuevo idioma y decidió que quería aprender las vocales en inglés también.

Así que esa misma tarde fue a su casa y buscó en internet cómo pronunciar cada vocal en inglés. "¡Mamá! ¡Papá! ¡Quiero aprender las vocales en inglés!", exclamó Sofía emocionada. Sus padres se sorprendieron por la petición de Sofía, pero al ver lo entusiasmada que estaba decidieron ayudarla.

Comenzaron a buscar juegos y canciones divertidas para enseñarle las vocales en inglés. "A como Apple (manzana), E como Elephant (elefante), I como Ice cream (helado), O como Orange (naranja), U como Umbrella (paraguas)", repetían juntos una y otra vez.

Sofía practicaba todos los días repitiendo las palabras y haciendo ejercicios para recordar cómo se pronunciaban cada una de las vocales. Sus padres la animaban y la apoyaban en todo momento.

Un día, la maestra de Sofía les propuso hacer una presentación sobre las vocales en inglés frente a toda la clase. Sofía estaba nerviosa pero emocionada por mostrar todo lo que había aprendido.

Llegó el día de la presentación y Sofía subió al frente de la clase con seguridad. Comenzó a decir: "A like Apple, E like Elephant, I like Ice cream... " Todos sus compañeros la miraban asombrados por lo bien que pronunciaba cada palabra.

Al terminar su presentación, todos aplaudieron emocionados y la maestra felicitó a Sofía por su excelente trabajo. Desde ese día, Sofía se convirtió en la experta de las vocales en inglés de su clase y todos querían aprender con ella.

Sofía descubrió que aprender un nuevo idioma no solo era divertido sino también gratificante. Y así siguió explorando el mundo del inglés con entusiasmo y alegría junto a sus amigos y familiares en Villa Alegre.

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