Sofía y su fiel compañero de la selva
Había una vez en lo más profundo de la selva, una niña llamada Sofía. Sofía vivía rodeada de árboles gigantes, ríos cristalinos y animales salvajes.
Un día, mientras exploraba cerca del río, escuchó un llanto lastimero que provenía de unos arbustos. Con curiosidad se acercó y descubrió a un pequeño perrito abandonado. "¿Qué te pasó, perrito? No llores, yo te cuidaré", le dijo Sofía con ternura.
El perrito la miró con sus ojitos tristes y movió la cola agradecido. Desde ese momento, Sofía decidió llevarse al perrito consigo y protegerlo de los peligros de la selva. Sin embargo, no todo sería fácil para Sofía y su nuevo amigo.
Pronto se dieron cuenta de que el perrito tenía malos dueños que lo habían abandonado por ser "demasiado travieso". Además, debían enfrentarse a los animales salvajes que veían al perrito como presa fácil.
Un día, mientras caminaban por el bosque, un tigre hambriento apareció frente a ellos. "¡Corre, perrito! ¡Vamos rápido!", gritó Sofía asustada. El tigre persiguió a los dos amigos por el espeso bosque. Pero gracias a la valentía y astucia de Sofía, lograron despistar al feroz animal y escapar sanos y salvos.
A pesar de los obstáculos en su camino, Sofía nunca perdió la esperanza ni dejó atrás al perrito.
Juntos construyeron una pequeña cabaña en lo alto de un árbol para estar seguros por las noches y aprendieron a buscar comida en el bosque. Con el paso del tiempo, el perrito demostró ser leal y cariñoso con Sofía. Se convirtieron en inseparables compañeros de aventuras y travesuras en la selva.
Una noche estrellada, mientras contemplaban el cielo desde lo alto del árbol, Sofía abrazó al perrito con amor y cariño:"Gracias por llegar a mi vida cuando más te necesitaba. Juntos superamos todos los obstáculos y ahora somos felices".
El perrito movió la cola contento y ladró como si estuviera respondiendo: "Yo también soy feliz contigo". Y así fue como Sofía encontró la verdadera amistad en medio de la selva: junto a su fiel amigo animal que siempre estuvo a su lado sin importar las dificultades.
Juntos vivieron muchas aventuras emocionantes llenas de aprendizaje mutuo sobre el valor del amor incondicional y la importancia de cuidar a quienes nos necesitan.
Y aunque enfrentaron desafíos juntos, siempre supieron que nada podía separarlos porque tenían un vínculo especial que perduraría para siempre en sus corazones.
FIN.