Soldaditos de Plomo en Navidad

En el colegio Miguel de Cervantes, la navidad era una época muy especial.

Los alumnos de secundaria esperaban con ansias la llegada de las vacaciones, pero antes debían pasar por un último desafío: decorar todo el colegio para crear un ambiente festivo y acogedor. Este año, el encargado de la decoración fue el profesor de arte, Don Ramón. Había decidido sorprender a todos con una temática diferente: soldaditos de plomo.

Durante semanas, trabajó arduamente para crear pequeños soldaditos que adornarían cada rincón del colegio. El día antes del comienzo de las vacaciones, los estudiantes se reunieron en el patio central para admirar la obra maestra del profesor Don Ramón.

Quedaron asombrados al ver cómo los pasillos estaban llenos de soldaditos cuidadosamente colocados en diferentes poses y escenas. "¡Wow! Esto es increíble", exclamó Tomás, uno de los alumnos más entusiastas. "Sí, es impresionante", agregó Sofía emocionada.

Los estudiantes comenzaron a explorar cada rincón del colegio mientras admiraban los detalles y la dedicación puesta en cada figura. Sin embargo, algo extraño comenzó a suceder. Los soldaditos parecían cobrar vida propia. Movían sus brazos y piernas lentamente como si estuvieran vivos.

"¿Esto es normal?", preguntó Martín intrigado. Nadie sabía qué responder ya que nunca habían presenciado algo así antes. Decidieron seguir observando sin intervenir hasta descubrir qué estaba sucediendo realmente.

A medida que avanzaba la tarde, los soldaditos de plomo comenzaron a interactuar entre ellos. Formaban filas, saludaban con una inclinación y hasta parecían estar conversando en un lenguaje secreto que solo ellos entendían. "¡Esto es mágico!", exclamó Sofía emocionada. Los estudiantes se acercaron más para escuchar lo que decían los soldaditos.

Con sorpresa, descubrieron que hablaban sobre el verdadero significado de la navidad: amor y compañerismo.

"En esta época del año, debemos recordar que lo más importante no son los regalos ni las luces brillantes", dijo uno de los soldaditos con voz suave pero firme. "Lo más valioso es el amor y apoyo que nos brindamos unos a otros". Los estudiantes quedaron en silencio mientras reflexionaban sobre estas palabras tan sabias.

Se dieron cuenta de que habían estado tan ocupados pensando en las vacaciones y los regalos, que se olvidaron del verdadero espíritu navideño. Decidieron hacer algo especial para expresar su amor y compañerismo hacia sus compañeros y maestros.

Organizaron una colecta para ayudar a familias necesitadas, escribieron tarjetas de buenos deseos para todos en el colegio e incluso prepararon una pequeña obra teatral sobre la importancia de la amistad.

Al finalizar el día escolar, los alumnos se despidieron emocionados por las vacaciones pero también llenos de gratitud por todo lo aprendido durante ese día tan especial. "Gracias por enseñarnos el verdadero significado de la navidad", le dijeron al profesor Don Ramón.

El profesor sonrió y les recordó que el espíritu navideño no solo debía vivirse durante las fiestas, sino durante todo el año. Los estudiantes asintieron con entusiasmo y prometieron llevar consigo las enseñanzas de los soldaditos de plomo para siempre.

Así, el colegio Miguel de Cervantes se convirtió en un lugar lleno de amor y compañerismo, donde cada navidad los soldaditos de plomo volvían a cobrar vida para recordarles a todos la importancia de estar juntos y apoyarse mutuamente.

Y así fue como una simple decoración navideña se convirtió en una lección inolvidable para todos.