Capítulo 1: Un amanecer ruidoso
El sol empezaba a pintar el cielo de naranja y rosa. En la granja "El Trébol Feliz", un gallo llamado Coco se estiraba y sacudía sus plumas brillantes. ¡Era hora de cantar! Coco infló su pecho y, con toda su fuerza, cantó: "¡Qui-qui-ri-quí! ¡Buenos días, mundo!"
(Dibujo: Coco, un gallo colorido con plumas brillantes, cantando con entusiasmo en un amanecer soleado. Hay flores y un establo en el fondo.)
Capítulo 2: Una visitante inesperada
Mientras Coco cantaba, una pequeña comadreja llamada Lila, que vivía en el bosque cercano, se despertó sobresaltada. Lila nunca había escuchado un canto tan fuerte. "¿Qué es ese ruido?", se preguntó Lila, asustada. "¡Suena como... como un monstruo!"
Lila era muy curiosa, así que, a pesar de su miedo, decidió investigar. Sigilosamente, se acercó a la granja, escondiéndose detrás de los árboles y los arbustos.
(Dibujo: Lila, una comadreja pequeña y curiosa, escondida detrás de un árbol, mirando hacia la granja con ojos grandes y asustados.)
Capítulo 3: El plan de Lila
Cuando Lila vio a Coco cantando con tanta alegría, se dio cuenta de que no era un monstruo, ¡era solo un gallo! Pero el canto seguía siendo muy fuerte. Lila pensó: "Si sigue cantando así, ¡nunca podré dormir! Tengo que hacer algo".
Lila tuvo una idea. "¡Le daré un susto!", pensó. "Así aprenderá a no cantar tan fuerte por la mañana".
(Dibujo: Lila pensando en un plan, con una expresión traviesa en su rostro. Tiene una ramita en la mano y está mirando a la granja.)
Capítulo 4: Un susto que salió mal
Lila se acercó sigilosamente a Coco. Cuando estuvo lo suficientemente cerca, saltó y gritó: "¡Buuu!"
Coco se asustó tanto que dio un salto en el aire y perdió el equilibrio. ¡Cayó de cabeza en un balde lleno de agua!
(Dibujo: Lila saltando hacia Coco y gritando "¡Buuu!". Coco está saltando asustado y cayendo hacia un balde con agua.)
Capítulo 5: Una disculpa inesperada
Lila se sintió muy mal al ver a Coco empapado y temblando. "Lo siento, Coco", dijo Lila, con la cabeza gacha. "No quería hacerte daño. Solo quería que dejaras de cantar tan fuerte".
Coco salió del balde, sacudiéndose el agua. Miró a Lila con tristeza. "Yo solo estaba dando los buenos días", dijo Coco. "Pero entiendo que mi canto pueda ser molesto. Quizás pueda cantar un poco más bajo".
(Dibujo: Coco, mojado y triste, mirando a Lila, que está mirando al suelo con remordimiento. El balde con agua está al lado de Coco.)
Capítulo 6: Una nueva amistad
Lila se acercó a Coco y le ofreció una flor silvestre. "Para que te sientas mejor", dijo Lila. "Y prometo que no volveré a asustarte".
Coco sonrió y aceptó la flor. "Gracias, Lila", dijo Coco. "Tal vez podamos ser amigos".
Desde ese día, Coco cantó un poco más bajo por la mañana, y Lila visitaba a Coco en la granja todos los días. Aprendieron a respetar sus diferencias y se convirtieron en los mejores amigos.
(Dibujo: Coco y Lila, ahora amigos, sentados juntos bajo un árbol. Coco tiene la flor silvestre que le dio Lila. El sol brilla y los pájaros cantan.)