Sueños de Superhéroes

Un día, León estaba jugando en su habitación con sus juguetes de superhéroes favoritos. Tenía a Iron Man, Hulk, Capitán América y Thor listos para luchar contra los villanos.

De repente, se dio cuenta de que estaba un poco cansado y decidió irse a dormir. Pero antes de acostarse, León le preguntó a su tío si podía tener un vientito con los Vengadores y Spider-Man para dormir.

Su tío sonrió y le dijo: "¡Por supuesto! Déjame ver qué puedo hacer". Así que su tío fue a la tienda de juguetes más cercana y compró una manta nueva con todos los personajes de Marvel impresos en ella. Cuando regresó a casa, se la entregó a León.

León estaba tan emocionado que no podía esperar para usarla esa noche antes de dormir. Así que se cepilló los dientes, se puso el pijama y saltó directamente debajo de la manta nueva.

Mientras miraba hacia arriba, vio las caras sonrientes de sus héroes favoritos y comenzó a imaginar todas las aventuras épicas que podrían tener juntos. "Iron Man", dijo León. "¿Puedo ser como tú cuando sea grande?""Claro que sí", respondió Iron Man desde la manta.

"Y yo quiero ser como Hulk", interrumpió León mientras hacía un gesto musculoso con su brazo pequeño. "¡Ja ja ja!", rió Hulk. "Tendrás que comer muchas verduras primero".

León siguió hablando con sus héroes durante unos minutos más hasta que comenzó a sentirse somnoliento. Pero justo cuando estaba a punto de cerrar los ojos, un ruido fuerte lo asustó. "¿Qué fue eso?", preguntó León mientras se aferraba a su manta.

"No te preocupes", dijo Spider-Man desde el otro lado de la cama. "Solo es el viento golpeando las ventanas". León respiró aliviado y se sintió más seguro sabiendo que sus héroes estaban allí para protegerlo incluso en sueños.

Finalmente, cerró los ojos y se durmió profundamente con una sonrisa en su rostro. Al día siguiente, León le contó emocionado a su tío sobre todos los sueños increíbles que tuvo esa noche gracias a la manta de superhéroes.

Desde entonces, cada vez que León tenía problemas para dormir, simplemente se acurrucaba debajo de su manta nueva y dejaba que sus héroes favoritos lo llevaran hacia aventuras épicas hasta que finalmente caía dormido.