Tito y la Tormenta

Había una vez un gato llamado Tito que vivía en el campo. Era un gato muy curioso y aventurero, siempre estaba explorando los alrededores de su casa y jugando con sus amigos animales.

Un día, mientras Tito estaba jugando con sus amigos cerca de la escuela del pueblo, notaron algo extraño en el horizonte. Era un tornado que se acercaba rápidamente hacia ellos.

Todos los animales comenzaron a correr para ponerse a salvo, pero Tito se quedó paralizado por el miedo. No sabía qué hacer ni adónde ir. El viento empezó a soplar fuertemente y las ramas de los árboles empezaron a caer alrededor de él.

De repente, una voz amable lo llamó desde la ventana de la escuela: "¡Tito! ¡Ven aquí! ¡Rápido!". Tito vio a la maestra asomada por la ventana y decidió correr hacia ella.

La maestra lo tomó en brazos y lo llevó dentro del edificio, donde todos los demás animales estaban refugiados también. "Gracias por salvarme", dijo Tito temblando. "No hay problema", respondió la maestra sonriendo. "Pero ahora tenemos que esperar hasta que pase el tornado". Los minutos pasaron lentamente mientras afuera todo era caos y desorden.

Pero dentro de la escuela había calma y seguridad gracias al liderazgo de la maestra. "¿Qué podemos hacer para ayudar?", preguntó Tito ansioso por contribuir. "Bueno, podríamos cantar una canción juntos para mantenernos tranquilos", sugirió la maestra.

Y así, Tito y los demás animales comenzaron a cantar una canción que habían aprendido en la escuela. La letra decía: "No tengas miedo, todo pasará, juntos podemos superar cualquier tempestad". El tiempo pasó y finalmente el tornado se alejó del pueblo.

Los animales salieron de la escuela para ver los daños que había causado el fenómeno natural.

Algunos árboles habían caído y algunos techos se habían volado, pero todos estaban a salvo gracias a su valentía y trabajo en equipo. "¡Qué día tan loco!", dijo Tito riendo nerviosamente. "Sí, pero lo importante es que estamos bien", respondió la maestra con una sonrisa.

Desde ese día, Tito aprendió que siempre hay esperanza y soluciones ante las situaciones difíciles si trabajamos juntos y manteniendo la calma. Y así fue como se convirtió en un líder más fuerte para su comunidad animal del campo.