Tomás en el futuro

Un día, mientras Tomás jugaba con su amigo Lucas, se le ocurrió una idea loca: ¿qué pasaría si pudiera ver cómo sería su vida en el futuro? Después de investigar un poco en internet, encontró un extraño dispositivo que supuestamente lo llevaría al futuro. Sin pensarlo dos veces, Tomás decidió probarlo. Se subió al dispositivo y presionó el botón verde.

De repente, todo a su alrededor comenzó a girar y girar hasta que se detuvo bruscamente. Cuando abrió los ojos, estaba en un lugar desconocido. No había rastro de su casa ni de su familia. "¿Dónde estoy?"- preguntó Tomás asustado.

"Estás en el año 2050"- respondió una voz detrás de él. Tomás se dio vuelta y vio a una mujer alta con una bata blanca que llevaba consigo un extraño aparato.

"Soy la doctora Rodríguez- dijo ella- ¿Cómo llegaste aquí?"Tomás explicó lo que había pasado y la doctora Rodríguez pareció sorprendida por lo que escuchaba. "Eso es imposible"- dijo ella"Nunca antes hemos tenido éxito con ese tipo de dispositivos".

La doctora Rodríguez decidió hacerle algunas pruebas para asegurarse de que Tomás estaba bien y luego le mostró cómo era el mundo en el año 2050. Le enseñó edificios altísimos construidos con materiales desconocidos para él, autos voladores surcando los cielos y robots haciendo las tareas del hogar.

Tomás estaba fascinado con todo lo que veía, pero también se sentía un poco triste al pensar en su familia y amigos del presente.

Sin embargo, algo más le preocupaba: ¿cómo haría para volver a casa?"No te preocupes"- dijo la doctora Rodríguez"Haremos todo lo posible para ayudarte a regresar". La doctora Rodríguez trabajó incansablemente durante días tratando de encontrar una forma de enviar a Tomás de vuelta al pasado.

Finalmente, dio con la solución: necesitaban construir otro dispositivo que pudiera enviarlo de vuelta. Tomás estuvo muy contento cuando escuchó la noticia. Ayudó a la doctora Rodríguez en todo lo que pudo y finalmente el dispositivo estuvo listo. "¿Seguro que funcionará?"- preguntó Tomás nervioso.

"No hay manera de saberlo con certeza"- respondió la doctora Rodríguez"Pero estoy segura de que sí". Tomás se subió al dispositivo y presionó el botón verde una vez más.

Esta vez, sintió cómo su cuerpo era absorbido por un vórtice brillante hasta que finalmente llegó a su hogar del presente. Cuando abrió los ojos, estaba en su habitación rodeado por su familia y amigos. Todos parecían muy felices al verlo.

"¡Tomas! ¿Estás bien?"- preguntó emocionada su madre mientras lo abrazaba fuerte. Tomás sonrió ampliamente mientras les contaba sobre sus aventuras en el futuro. Aunque había estado asustado y triste al principio, había aprendido mucho sobre el mundo y sobre sí mismo gracias a esta experiencia inesperada.

Desde entonces, Tomás se convirtió en un niño más valiente y aventurero. Siempre recordaría su viaje al futuro con mucho cariño y lo utilizaría como inspiración para hacer cosas increíbles en el presente.