Tomas y el misterio del barrio vacío

Tomas era un niño curioso que vivía en un barrio con muy pocos habitantes. Desde que tenía memoria, siempre se preguntaba por qué habían tan pocas personas en su barrio, y por qué la mayoría de las casas parecían abandonadas.

Un día, Tomas decidió investigar el misterio del barrio vacío. Armado con su mochila, una linterna y su valentía, se aventuró a explorar las calles desiertas.

Mientras caminaba, se encontró con el abuelo Ramón, un vecino anciano que siempre había vivido en el barrio. -Hola, abuelo Ramón, ¿por qué nuestro barrio está tan vacío? -preguntó Tomas con curiosidad.

El abuelo Ramón le explicó que años atrás, una empresa había prometido construir un parque y una escuela en el barrio, lo que atrajo a muchas familias. Pero la empresa nunca cumplió su promesa, y la gente empezó a irse del barrio en busca de mejores oportunidades.

Tomas, decidido a hacer algo al respecto, decidió hablar con los vecinos y organizar un plan para mejorar su barrio. Juntos, limpiaron las calles, pintaron las casas abandonadas y plantaron árboles. Poco a poco, el barrio empezó a cobrar vida de nuevo, y nuevas familias se mudaron allí.

Al final, el esfuerzo de Tomas y sus vecinos logró convertir el barrio vacío en un lugar próspero y acogedor. Tomas aprendió que con determinación y trabajo en equipo, podía lograr grandes cosas, y su barrio se convirtió en un ejemplo de comunidad unida.