Tomas y la carrera de motos


Tomas estaba emocionado por asistir a su primera carrera de motos. Se puso su casco y se paró al borde de la pista para ver a los corredores pasar a toda velocidad.

De repente, tropezó y cayó a la pista justo cuando un piloto se acercaba a toda velocidad. El público gritó asustado, pero el piloto, con reflejos rápidos, logró esquivarlo por muy poco. Tomas se levantó asustado y decidido a no arruinar su día.

A pesar del susto, se acercó a los corredores y les pidió disculpas. Uno de ellos, Martín, se acercó a Tomas y le explicó la importancia de estar atento en todo momento.

Martín le ofreció un paseo en su moto mientras daba una vuelta de exhibición. Tomas aceptó emocionado y Martín lo llevó a dar una vuelta alrededor de la pista. Sintió la velocidad y la emoción, pero también la responsabilidad que conlleva manejar una moto.

Al regresar, Tomas se despidió de Martín con una sonrisa. Desde ese día, Tomas aprendió a ser más cuidadoso y a respetar las reglas de seguridad vial, y también hizo un nuevo amigo.

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