Tommy aprende a contar
Tommy era un simpático osito que vivía en el bosque. Un día, su amiga la conejita Lola le propuso jugar a contar. -Tommy, vamos a ver cuántas mariposas encontramos en el prado -dijo Lola emocionada.
Tommy asintió con entusiasmo y juntos se dirigieron al prado. -¡Mira, Tommy! ¡Una, dos, tres mariposas! -exclamó Lola señalando a las coloridas mariposas que revoloteaban en el aire. Tommy observó atentamente y dijo: -Una, dos, tres... ¡cinco mariposas! -dijo confundido.
Lola rió cariñosamente y le explicó: -No, Tommy, son tres mariposas, pero no te preocupes, ¡podemos contar juntos! Así, Tommy y Lola pasaron la tarde contando flores, árboles y animalitos del bosque.
Cada día, practicaban un poco más, y Tommy se volvía cada vez más hábil para contar. Pronto, Tommy se convirtió en el mejor contador del bosque, y todos sus amigos acudían a él para aprender a contar. Desde entonces, Tommy disfrutaba mucho contar y enseñar a otros a hacerlo.
FIN.