Un día complicado en la UTU


Dana Yazmín era una niña muy curiosa y aplicada que asistía a la escuela UTU María Espínola. Un día, Dana Yazmín tuvo un día complicado en la escuela.

Llegó tarde a clase, se olvidó de hacer la tarea y tuvo dificultades para concentrarse durante la jornada. Su maestra, la señorita Marta, se dio cuenta de que algo le pasaba y se acercó a hablar con ella.

-¿Qué te pasa, Dana? Veo que hoy estás un poco distraída -le preguntó la maestra. Dana Yazmín le contó todo lo que le había sucedido desde la mañana: se había levantado tarde, se olvidó de la tarea en casa, y había tenido un mal encuentro con sus compañeros.

La señorita Marta la escuchó con atención y le dio un fuerte abrazo. -A veces, todos tenemos días difíciles, Dana. Pero lo importante es cómo los enfrentamos. Recuerda que siempre puedes pedir ayuda y que no estás sola. Juntos podemos buscar soluciones.

Dana se sintió reconfortada por las palabras de su maestra y decidió ponerse en marcha para mejorar su día.

Se comprometió consigo misma a organizarse mejor en las mañanas, a no olvidar sus responsabilidades y a hablar con sus compañeros para poder resolver las diferencias. Así, poco a poco, Dana fue superando los obstáculos que se le habían presentado. Incluso recibió ayuda de sus compañeros y se sintió muy feliz.

Al final del día, Dana se acercó a la señorita Marta para agradecerle por su apoyo. -¡Gracias, maestra! Hoy aprendí que siempre hay una solución para cada problema y que no estoy sola. La señorita Marta sonrió y le dio un diploma a Dana Yazmín que decía 'Mujer valiente y perseverante'.

Dana se sintió muy orgullosa y comprendió que los días complicados también pueden ser una oportunidad para aprender y crecer.

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