Un día de verano con los primos


Era un hermoso día de verano y los primos Bruno, Valentina, Marti, Nacho y Bauti se encontraban en la casa de sus abuelos. Todos estaban muy emocionados por pasar tiempo juntos y jugar.

"¿Qué juego jugamos primero?" preguntó Nacho. "¡Yo quiero jugar al fútbol!" exclamó Bruno. "Bueno, pero yo no sé jugar muy bien" dijo Bauti tímidamente.

Valentina intervino: "No te preocupes Bauti, ¡yo te enseño! Vamos a hacer equipos y a divertirnos juntos". Los primos formaron dos equipos para jugar al fútbol en el jardín. Bruno era el capitán del equipo rojo mientras que Valentina lideraba el equipo azul. El partido comenzó y todos disfrutaron del juego.

Pero pronto hubo un giro inesperado en la trama. Marti se lastimó una pierna durante el partido y tuvo que sentarse fuera del campo. Los demás primos se preocuparon mucho por él.

"¿Estás bien Marti?" preguntó Nacho con angustia. "Sí, estoy bien gracias. Solo me torcí un poco el tobillo" respondió Marti con una sonrisa valiente. Los demás primos le dieron ánimo a Marti para que se sintiera mejor.

Entonces decidieron cambiar de actividad para evitar más lesiones. Valentina sugirió: "Podemos dibujar y hacer manualidades juntos". Los primos estuvieron muy emocionados con esta idea ya que les encantaba ser creativos. Se pusieron manos a la obra e hicieron collages, dibujos y pinturas.

Bauti hizo un dibujo muy tierno de su familia. "¡Miren lo que hice!" exclamó Bauti emocionado. Los demás primos se acercaron a ver su obra y quedaron impresionados con el talento de Bauti.

Todos se sintieron muy felices al compartir sus creaciones. Después de un rato, los primos decidieron hacer una merienda juntos para reponer energías. Prepararon sandwiches, jugos y galletas caseras.

Se sentaron en la mesa del comedor y compartieron sus alimentos mientras charlaban animadamente. "La pasamos genial hoy" dijo Nacho con una sonrisa enorme. "Sí, fue divertido jugar al fútbol juntos aunque nos lastimamos un poco" respondió Valentina.

"Y también me gustó mucho hacer manualidades con ustedes" agregó Bauti tímidamente pero feliz. Todos estuvieron de acuerdo en que había sido un día maravilloso lleno de aventuras, aprendizajes e historias para contar. Los primos se despidieron con abrazos y prometiendo volver a verse pronto para seguir divirtiéndose juntos.

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