Un día en la playa con la vaca, el ratón y el sapo

Había una vez una vaca, un ratón y un sapo que vivían en el campo. Un día, decidieron que sería divertido ir juntos a la playa. La vaca se puso su sombrero de paja, el ratón agarró su pequeña sombrilla y el sapo llevó su protector solar.

Cuando llegaron a la playa, la vaca fue la primera en zambullirse en el agua. "¡Ay, el agua está fría pero refrescante!" exclamó la vaca. El ratón estaba un poco asustado de meterse en el agua, pero luego vio a algunos niños construyendo castillos de arena y decidió unirse a ellos. Mientras tanto, el sapo estaba cavando agujeros en la arena y saltando de un lado a otro.

De repente, la vaca vio a un grupo de delfines jugando en el agua y llamó a sus amigos para que los vieran. "¡Miren, miren! ¡Qué hermosos son!" exclamó la vaca, emocionada. El ratón y el sapo corrieron hacia la orilla y se maravillaron al ver a los delfines saltando y jugando.

Después de un rato, el sol comenzó a ponerse y la vaca, el ratón y el sapo se sentaron juntos en la arena para ver el hermoso atardecer. "Este fue un día maravilloso", dijo la vaca con una sonrisa. "Sí, me divertí mucho", agregó el ratón. El sapo, mirando hacia el horizonte, suspiró y dijo: "Es increíble lo hermosa que es la naturaleza".

Ya de regreso en el campo, los tres amigos recordaron con alegría su día en la playa. A partir de ese día, planearon más aventuras juntos, sabiendo que siempre encontrarían diversión y belleza en el mundo que los rodeaba.