Un día especial en la escuela

En la escuela Primavera, los niños y niñas siempre seguían las reglas. Todos sabían que debían levantar la mano para hablar y esperar su turno para participar. Un día, la maestra Laura les anunció que tendrían una actividad muy especial. Todos se emocionaron y se preguntaban qué sería.

Cuando llegó la hora de la actividad, la maestra Laura les pidió que formaran un círculo y les explicó que jugarían al 'Juego de la Paciencia'. Los niños no sabían de qué se trataba, pero estaban dispuestos a seguir las reglas del juego.

La maestra les explicó que cada uno de ellos tendría un papel y tendrían que esperar su turno para actuar. Les dijo que la clave para ganar el juego era seguir las reglas y ser pacientes. Los niños asintieron con entusiasmo y se dispusieron a empezar.

- ¡Listos! ¡Empieza el juego! - exclamó la maestra Laura. El juego consistía en superar obstáculos y resolver problemas, siempre siguiendo las normas de la paciencia y el respeto por los turnos.

El primer desafío fue una actividad de trabajo en equipo, donde cada niño tenía que contribuir con una idea siguiendo las reglas de escuchar atentamente a los demás y levantar la mano para hablar. Fue asombroso ver cómo los niños se ayudaban unos a otros y seguían las reglas sin problemas.

Luego, llegó el momento de la paciencia. La maestra Laura les propuso un juego de espera, donde debían resistir la tentación de tomar un dulce que estaba frente a ellos hasta que les indicara que podían tomarlo. Fue difícil, pero todos lograron resistir la tentación y esperaron el momento adecuado para tomar el dulce.

Finalmente, la maestra les propuso un desafío sorpresa en el que debían esperar su turno para resolver un acertijo. Todos estaban tan emocionados que no podían quedarse quietos. Pero aplicando lo aprendido, esperaron su turno con paciencia y resolvieron el acertijo con éxito.

Al terminar el juego, la maestra reunió a los niños y les felicitó por su excelente comportamiento. Les explicó que el 'Juego de la Paciencia' había sido una lección de aprendizaje importante. Les dijo que al seguir las reglas, respetar los turnos y tener paciencia, habían logrado superar los desafíos y trabajar juntos de manera armoniosa. Los niños se sintieron muy orgullosos de sí mismos y comprendieron lo importante que es seguir las reglas y esperar su turno.

Desde ese día, en la escuela Primavera, todos los niños recordaron la importancia de seguir las normas, levantar la mano para hablar y esperar su turno. Y así, cada día se esforzaban por ser respetuosos y pacientes, sabiendo que seguir las reglas los llevaba a lograr grandes cosas juntos.