Un final feliz




Había una vez en un lejano reino de nieve, donde todos los habitantes estaban preocupados por el cambio climático y el derretimiento de los glaciares.

Los osos polares, los pingüinos, y las focas se juntaron para encontrar una solución a su problema. "¡Debemos trabajar juntos para salvar nuestro hogar!" dijo la pingüina Sofia. "Tal vez podríamos pedir ayuda a los humanos", sugirió el oso polar, Bruno.

Y así, decidieron enviar una carta a una niña llamada Lucia, que amaba la nieve y los animales. Lucia leyó la carta y decidió ayudar. Ella convocó a un concurso de ideas para salvar el Ártico, al que acudieron científicos y ambientalistas de todo el mundo.

Juntos encontraron una solución para detener el derretimiento de los glaciares. Desarrollaron un plan para reducir la emisión de gases de efecto invernadero y limpiar la basura que dañaba el hábitat de los animales.

Gracias a la ayuda de Lucia y la sociedad de la nieve, el reino polar volvió a estar a salvo. Los animales bailaron de alegría en un gran festival de agradecimiento, y desde entonces, la solidaridad y el cuidado del medio ambiente se convirtieron en prioridades en todo el mundo.

FIN.

Dirección del Cuentito copiada!