un partido de fútbol en la playa

Había una vez tres cerditos llamados Pancho, Pepe y Pablito que vivían en una hermosa playa. Les encantaba jugar al fútbol juntos todas las tardes.

Un día, mientras estaban practicando en la arena, un lobo hambriento llamado Lucas los observaba desde lejos. "Miren chicos, ¡qué divertido es jugar al fútbol en la playa!" exclamó Pancho. "Sí, el aire fresco del mar nos hace sentir más vivos", agregó Pablito.

De repente, el lobo Lucas se les acercó con una sonrisa en el rostro. "Hola amigos, ¿puedo unirme a su juego?" preguntó el lobo con voz amigable. Los cerditos, algo sorprendidos, estuvieron de acuerdo y le dijeron que se pusiera en el equipo de ellos.

Comenzaron a jugar y Lucas demostró ser un excelente jugador de fútbol. Anotó varios goles y se divirtió mucho. Después de un emocionante partido, Pancho le preguntó al lobo Lucas si quería ser su amigo.

Lucas, con lágrimas en los ojos, les confesó que en realidad no era un lobo malo, sino que solo quería hacer amigos. Los cerditos lo abrazaron y le dijeron que a partir de ese momento él sería parte de su grupo.

Desde ese día, los cerditos y Lucas jugaron al fútbol juntos en la playa, demostrando que la verdadera amistad no conoce de diferencias. Y juntos, fueron imparables en el campo de juego.