Un viaje en el tiempo
Había una vez un niño llamado José, a quien le encantaba soñar con viajar en el tiempo y descubrir nuevos mundos. Un día, mientras exploraba un misterioso laboratorio abandonado, José encontró una extraña máquina del tiempo.
Sin dudarlo, decidió activarla y, para su sorpresa, se vio transportado a la época de los dinosaurios. Cuando llegó, se encontró con un majestuoso Tiranosaurio Rex. En lugar de asustarse, José decidió acercarse al gigantesco dinosaurio con curiosidad.
-¡Hola! Soy José, ¿y tú? -dijo José con valentía. El tiranosaurio, llamado Rex, lo miró con sorpresa, pero en vez de rugir, emitió un sonido amistoso. Desde ese momento, José y Rex se convirtieron en amigos inseparables.
Juntos, exploraron la antigua tierra de los dinosaurios, aprendiendo sobre las diferentes especies y compartiendo momentos de diversión. Sin embargo, un día, un grupo de velociraptores amenazó con atacar a José. Rex, con gran valentía, se interpuso entre ellos y su amigo, mostrando su poderoso rugido.
Impresionados por la determinación del tiranosaurio, los velociraptores huyeron asustados. José comprendió que, a pesar de su imponente tamaño, Rex era un amigo leal y protector.
Con el paso del tiempo, José logró reparar la máquina del tiempo y, aunque le dolía separarse de su amigo Rex, decidió regresar a su época. Antes de partir, prometieron que su amistad trascendería el tiempo y el espacio.
De vuelta a casa, José compartió sus increíbles aventuras con los dinosaurios, enseñando a otros la importancia de la valentía, la amistad y el respeto hacia los seres vivos, independientemente de su apariencia o especie.
FIN.