Una historia de diversidad y amistad
En el colorido pueblo de Colombia se encontraba la pequeña escuela 'El Sol Resplandeciente', donde estudiaba un niño llamado Jaimito. A sus 6 años, Jaimito irradiaba alegría y entusiasmo, a pesar de tener 47 cromosomas en lugar de 46.
Siempre llevaba consigo su mochila llena de pinturas y crayones, ya que le encantaba dibujar. Un día, la maestra anunció que realizarían un concurso de dibujo.
Todos los niños estaban emocionados, y aunque Jaimito estaba un poco inseguro al principio, decidió participar. Durante días, se esforzó en su dibujo, dándole vida a un hermoso paisaje con colores brillantes. "¡Jaimito, tu dibujo es increíble!" exclamó su amiga Luisa, mostrando su apoyo.
Sin embargo, Pablo, otro niño de la escuela, se burló del dibujo de Jaimito. "¿Qué hace un niño como tú participando en un concurso? Tus dibujos son raros", se burló Pablo.
Jaimito se entristeció, pero recuperó su alegría cuando recordó el consejo de su abuela: 'confía en ti mismo y nunca dejes que nadie apague tu brillo'. El día del concurso, todos los dibujos se exhibieron en el salón. Los niños y maestros maravillados por la habilidad de Jaimito, apreciaron su obra de arte.
Cuando llegó el momento de anunciar al ganador, la maestra dijo: "El ganador es... Jaimito". Los aplausos llenaron el salón y Jaimito no podía contener la emoción. Todos los presentes se dieron cuenta de que la verdadera belleza estaba en la originalidad y el esfuerzo.
A partir de ese día, Jaimito se convirtió en un ejemplo de valentía y amistad en la escuela, enseñando a todos que la diversidad y la inclusión son lo que realmente enriquece el mundo.
FIN.