Una lección de cooperación
En un bosque encantado, habitaban el imponente oso Bruno, el sigiloso lobo Lucas, el astuto zorro Ziggy y el curioso Pedrito. Un día, una sequía inesperada dejó al bosque sin comida, lo que desató problemas entre los habitantes del bosque.
"No hay suficiente comida para todos. Deberíamos buscar por separado", gruñó Bruno con preocupación. "Tienes razón, hermano Oso. No podemos depender de los demás", asintió Lucas con desconfianza.
"¡Yo siempre me las arreglo solo, no necesito a nadie!", exclamó Ziggy con orgullo. Mientras tanto, Pedrito escuchaba atentamente las discordias y decidió intervenir. "Amigos, entiendo que estamos preocupados, pero si trabajamos juntos, encontraremos soluciones", propuso Pedrito con optimismo.
A pesar de las dudas iniciales, los habitantes del bosque decidieron seguir el consejo de Pedrito y formaron equipos para buscar comida. El oso, el lobo y el zorro se sorprendieron al descubrir que juntos eran capaces de encontrar más alimentos de los que habrían hallado individualmente.
A medida que colaboraban, también se divertían y se conocían mejor. Después de un arduo día de trabajo en equipo, regresaron al claro del bosque con suficiente comida para todos. Al compartir lo que habían recolectado, comprendieron la importancia de la cooperación y la solidaridad.
Desde ese día, el bosque encantado se convirtió en un lugar donde sus habitantes siempre estaban dispuestos a ayudarse mutuamente, recordando la lección de Pedrito: juntos, todos son más fuertes.
FIN.